LA COPA

Señor pasa esta copa de mi.

Señor solo quiero que está situación pase sin dolor

Quiero aprobar sin estudiar.

Quiero ascender en ese puesto de trabajo sin tener que esforzarme tanto.

Quiero llegar, pero sin obstáculos.

Señor pasa esta copa de mi. ¿Cuántas veces hubieras elegido no pasar por aquella copa amarga? Sin pensar que tiene un propósito, un aprendizaje, un fruto. Sólo miramos la copa, no miramos por completo el panorama.

Jesús dijo sabiendo que iba a esa cruz: padre, si quieres, pasa esta copa de mí; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.

Aún consciente de todo el dolor que le llevaría dijo "pero que sea tu voluntad y no la mía", reflexionalo un par de minutos.

 Cuando mires nuevamente la copa, que sea la voluntad de Papá que pase o no, si Jesús no hubiera pasado por ella, no seríamos salvos, sino hubiese sido crucificado si su sangre no hubiese sido derramada, por vos y por mi, hoy no podríamos ser limpios de todo pecado...

Asi que cuando quieras pasar la copa, mira más allá y que no sea tu voluntad sino la de Él, porque quizas en el momento sea amarga, pero Dios tiene un plan. Tiene un propósito, solo queda confiar. Dice su palabra que el Señor tiene pensamientos de paz y no de mal, para darnos el fin que esperamos, que sus planes son de bien.

Mira esa copa como un propósito, no solo como algo amargo. Dios te ama y quiere lo mejor para vos.

Dios te bendiga!